Año 2030
LA EDUCACIÓN DEL FUTURO Echo la vista atrás y me encuentro clases pequeñas abarrotadas de alumnos que no disponen de material innovador para realizar ciertas actividades. Veo profesores saturados, sobrepasados por falta de conocimientos, de no saber gestionarse ni temporalmente ni emocionalmente. Los alumnos están poco motivados, no me extraña después de tener que escuchar un rollazo de 200 folios. Algunos ni si quiera quieren estar en clase, incluso se meten con sus profesores y compañeros. Llego al aula de informática y los ordenadores tienen lo menos 15 años...¡encenderlos ya es una tortura! Los libros de la biblioteca están viejos y rotos, pocos alumnos sienten atracción por la lectura ya que prefieren usar un libro electrónico. Pero a pesar de todo esto y más,yo crecà en esta época, yo adquirà los conocimientos necesarios para poder llegar a ser lo que hoy son en 2030.